28 de mayo de 2024

Todos venden en la PyME

Al leer el título del artículo usted se preguntará ¿y para qué tengo a los vendedores? ¿Acaso no son ellos los que toman contacto con los decisores, presentan sus argumentos, levantan objeciones y cierran efectivamente las ventas? Y sí, pero no lo hacen solos.

Recepcionistas, la gente de logística, quienes se ocupan de la técnica, la administración y obviamente el equipo de marketing, están directamente involucrados. En este artículo te cuento en qué medida gravitan cada uno de ellos/as y porqué una dueña/o o gerenta/e de pyme necesita que toda la empresa venda.

Los técnicos venden

El conocimiento seduce. En general nadie quiere comprar un equipo, una tecnología, o bien, un servicio y no recibir seguridad acerca de que quienes realizan la venta entiendan sus requerimientos o necesidades. Muchas veces esta demanda sobrepasa los conocimientos de los responsables de vender, y por lo tanto, acuden al técnico en su ayuda. Esta función, que suele denominarse preventa, o bien a veces la ejerce un gerente o encargado de producto o simplemente alguien responsable de producción, que colabora en asesorar y recomendar lo “mejor” para el cliente.

Pero las áreas técnicas también pueden tomar iniciativas para vender servicios, insumos o repuestos, que así completan la oferta de la empresa, en particular me refiero a las pymes que comercializan máquinas, equipamiento o tecnología. Abonos de mantenimiento o preventivos, capacitaciones, comercialización de repuestos, servicios de puesta en marcha, atenciones de emergencia, son algunas de las propuestas que muchas pymes deciden dejar en manos de las áreas técnicas, y bien que lo hacen.

En más de treinta años de consultoría me he ocupado en muchas ocasiones de asistir a las áreas técnicas en la detección de oportunidades, y no solo eso sino también de desarrollarlas. Esto logra aumentar el resultado de ventas y siempre mejora la rentabilidad del negocio.


La administración vende

Cuando dicto mis cursos de venta industrial o consultiva, los participantes se sorprenden al encontrarse en mi presentación con una acción de la etapa de cierre que no esperaban. Además de la negociación y el cierre comercial, menciono el cierre administrativo. Doy varios ejemplos de cómo las operaciones de venta se pueden caer por la mala gestión administrativa. Errores de facturación, de remitos, de notas de crédito, envíos a depósitos con direcciones erradas o inexistentes, mala comprensión de la burocracia del cliente, o bien, directamente, maltrato o falta de empatía del personal administrativo con sus pares del cliente, todo esto puede hacer caer una operación. Por lo tanto, idealmente, toda pyme espera que su área administrativa esté a la altura y que junto a sus comerciales: también venda, venda una imagen y gestión profesional, que no haga ruido alguno en la operación comercial.


La recepción telefónica y presencial vende

Seguramente habrá oído la remanida frase: “fue amor a primera vista”; quienes se ocupan de recepcionar telefónicamente o presencialmente al cliente son el paso inicial para generar la empatía necesaria en la gestión comercial. Derivar mal la llamada, hacer esperar en demasía a alguien que pide que lo comuniquen o atiendan, es probable que haga caer cualquier intento de generar una oportunidad.

Muchos clientes tal vez nunca visiten su empresa, desconozcan el tamaño de sus instalaciones, el buen gusto del diseño, o la comodidad de sus oficinas, ni sepan de los detalles sobre su equipamiento y tecnología con que cuenta su área de producción, pero seguramente se podrán llevar una impresión acerca de su empresa dependiendo de la atención telefónica. Quienes recepcionan telefónicamente la consulta crean una imagen auditiva de la empresa y esto no puede tomarse a la ligera, ellos y ellas también venden.

El marketing vende

Usted me dirá que es obvio que el marketing vende, pero la cuestión es que cada vez está más involucrado en el cierre.

Hace unas cuantas décadas un pope del marketing anunciaba que si el marketing era muy bueno no eran necesarios los vendedores. Hace unos pocos años atrás se lanzó con fuerza la estrategia del marketing inbound (tal vez usted ya haya oído hablar al respecto, es el marketing diseñado para sumar al potencial cliente bien adelante del ciclo de venta), que vino a caballo de las estrategias de marketing digital. Hoy en día el ecommerce y el diseño de sitios orientados a guiar al potencial comprador dentro del ciclo comercial es moneda corriente. El marketing no es solo imagen (que no está nada mal), hoy también es un llamado a la acción de cada interesado, y por diferentes canales.


Conclusión

Cualquier empleado puede ayudarlo a ganar una venta o bien hacerla caer, independientemente del puesto o responsabilidad que ocupe en la empresa.

Supervise cada puesto de trabajo en la empresa y cerciórese que al menos no le hará perder oportunidades. La búsqueda y desarrollo de oportunidades desde las áreas técnicas y la calidad de servicio al cliente son dos excelentes aliados de su estrategia comercial. Préstele atención pues todos venden.


Autor: Simón Lutvak (Simón es consultor, egresado del Posgrado en Management Estratégico) 

21 de mayo de 2024

Pequeño ensayo sobre la voluntad


Hay un error fundamental de concepto que vale la pena rectificar: creemos que la vida está gobernada por la inteligencia y no es así; la vida es regida por la voluntad.

Hay [personas] de extraordinaria mentalidad, capaces de discurrir con lógica inexorable acerca de los resortes más delicados de la política, para quienes la ciencia de gobernar carece de secretos [pero] no saben poner orden en su propia casa (...), economistas hay que discurren con suficiencia insuperada sobre problemas de la riqueza e ignoran el arte de ganarse la vida.

El ejercicio precoz de la voluntad es aconsejado. Ella es la podadora eficaz de las inclinaciones románticas. El entrenamiento de la personalidad no hace la vida necesariamente adusta. Se suele hablar de individuos de voluntad indomable: la voluntad es esencialmente domable; la que es indomable por ser ciega es la emotividad. El hombre que lleva adelante una empresa a sabiendas de que va a la ruina, por puntillo de honor o de amor propio, el que mantiene una decisión que ha tomado después de apercibirse de que es ella errada, sólo por no dar su brazo a torcer, se dejan llevar de su impulsividad, no de su voluntad. La voluntad es lógica, racional y por tanto flexible.


Fuente original: conferencia dada a los estudiantes el 4 de abril de 1932 en: "Patria y libertad: selección de discursos, artículos y documentos" de Eusebio Ayala (obra póstuma). Buenos Aires, 1952, p.p. 338-344 / Recopilación y adaptación de Eduardo Nakayama.

Fuente: LinkedIn de Eduardo Nakayama (Eduardo es egresado del Posgrado PIDE)

14 de mayo de 2024

Liderazgo efectivo según Drucker

🤝 En el vasto panorama del liderazgo, la sabiduría de Peter F. Drucker resuena con una verdad atemporal: "El liderazgo efectivo no se basa en hacer discursos o ser querido; el liderazgo se define por los resultados". Esta afirmación, aunque aparentemente simple, encapsula una visión profunda del papel del líder en la consecución de objetivos tangibles.

👁️‍🗨️ Drucker nos insta a mirar más allá de la superficie, más allá de las habilidades oratorias o la popularidad momentánea. En su enfoque, el liderazgo se mide en términos de resultados concretos y duraderos. No se trata simplemente de pronunciar discursos motivadores, sino de conducir a un equipo hacia logros tangibles y sostenibles.

🏹 En este contexto, es crucial que los líderes se centren en la ejecución estratégica y la toma de decisiones informadas. Los discursos inspiradores pueden generar entusiasmo temporal, pero son las acciones consistentes y alineadas con metas específicas las que definen el liderazgo efectivo. Los líderes verdaderamente exitosos son aquellos que traducen sus palabras en resultados tangibles para sus equipos y organizaciones.

🚀 En nuestra búsqueda de liderazgo efectivo, ¿Cuánto valor damos a los resultados reales?, ¿Nos enfocamos en la acción y la implementación, o nos contentamos con la retórica vacía? La reflexión sobre estas preguntas puede ser transformadora para cualquier líder que aspire a marcar una diferencia significativa.

💪 La esencia del liderazgo efectivo, según Drucker, radica en la capacidad de convertir visiones en realidades, de inspirar a través de logros tangibles más que a través de palabras elocuentes. Como líderes, debemos cuestionarnos constantemente si nuestras acciones están alineadas con los resultados que buscamos alcanzar.


Autor: Valentín Soto (Valentín es egresado de la Diplomatura DIDIE)

7 de mayo de 2024

¡No al multitasking! Y... ¿entonces?

Según Wikipedia, la multitarea (multitasking en inglés) es una aparente capacidad humana para realizar más de una tarea o actividad al mismo tiempo.

¡La mejor parte de esta definición es la palabra "aparente"!



Un poco de historia muy reciente...

El término multitasking estaba circunscripto originalmente al ámbito informático, para describir aquellos sistemas operativos que eran capaces de dar servicio a más de un proceso a la vez, permitiendo la ejecución de varios programas al mismo tiempo.

Esta característica sólo se puede lograr en computadoras que cuenten con un multiprocesador -o procesadores de varios núcleos- en los que cada núcleo se ocupa de un proceso diferente, ejecutándose de esta forma varios procesos al mismo tiempo. Ésta es una tecnología madura hoy en día y viene mejorándose desde el año 2005 (año en el que aparecieron los primeros DualCore).

Imagino te preguntarás cómo funcionaban las computadoras hasta entonces, cuando contaban con un único procesador. Pues sencillo: con interrupciones y gestión de prioridades.

El procesador se ocupaba de un proceso -llamémoslo A- hasta que otro proceso de mayor prioridad -B- lo interrumpía, entonces el proceso A quedaba en espera hasta que el proceso B dejara de ejecutarse. Así, al realizarse a altas velocidades, daba una sensación aparente de multitasking.


Y nuestro cerebro... ¿Cuántos procesadores o núcleos tiene?

Buena pregunta. En realidad, nuestro cerebro tiene muchos más núcleos y mayor velocidad de procesamiento que cualquier computadora actual. Sin embargo y a los fines del alcance de este artículo, es importante entender que podríamos considerar que nuestro cerebro tiene básicamente dos grandes procesadores: aquél que se ocupa de las funciones que se controlan inconscientemente (respirar, digerir, caminar, parpadear, mover coordinadamente todos los músculos de brazo y mano para alcanzar un objeto, etcétera) y aquél que se ocupa de las funciones conscientes, es decir, todas aquellas que requieren de nuestra atención y concentración.

Muchos experimentos han demostrado que, incluso aquellas tareas que por práctica las hacemos de forma aparentemente "inconscientemente", en realidad requieren que nuestro único procesador consciente las atienda. De hecho, un estudio realizado por René Marois (Vanderbilt Brain Institute), descubrió que el cerebro presenta un cuello de botella en la selección de respuestas cuando se le exige que realice varias tareas a la vez. Puedes ver un excelente experimento en este video.


Okay... no somos multitasking...

Antes de continuar, es importante que te haya quedado claro que sólo tenemos un único procesador para las tareas que hacemos a consciencia y por lo tanto, eso de multitasking... en realidad no existe.

Ahora, supongamos que alguien nos pide que hagamos tres tareas, la A, la B y la C al mismo tiempo y nos creemos -o nos creen- "multitasking":

En ese hipotético caso, hacer todas estas tareas en paralelo nos debiera llevar algo así como tres horas.

Pero como no podemos hacer más de una tarea al mismo tiempo -¿has visto el video que recomendé anteriormente?- intentaremos realizar un poco de cada tarea, saltando de una en otra.

Vamos a suponer que decidimos dedicarle una hora a cada tarea, y veamos que sucederá:

Si descartamos los tiempos que perderemos por cambiar de tarea -retomar donde la dejamos, y volver a concentrarnos en ella- igualmente observamos que hacer todas las tareas nos ha llevado seis horas, y no tres como imaginábamos. ¿Es obvio no? -Por supuesto.

Lo que no es tan obvio es que si consideramos el tiempo bruto, la tarea B la hemos realizado en cinco horas cuando debió habernos consumido sólo dos... ¡Más del doble de tiempo!


Gestionando Prioridades

¡Si la tarea B hubiera sido tu prioridad y la hubieses atacado de lleno al inicio, hubiera estado completa a las dos horas, en vez de a las cinco!

Entonces, sólo existe una sola forma eficiente de utilizar el tiempo y nuestra energía: Gestionando Prioridades.

No pienses en hacer rápido el trabajo, piensa en cómo hacerlo más eficiente.

El tiempo que le dedicas a una tarea, se lo quitas a otra.

Pon tu atención en donde está el mayor costo de oportunidad.

La Matriz de Eisenhower, por ejemplo, es una herramienta muy práctica para ayudar en ello:

Para finalizar, mi recomendación es muy sencilla: Dile NO!! al multitasking


Autor: Pablo Quintela (Pablo es egresado del Posgrado en Management Estratégico)