31 de octubre de 2023

El poder de la síntesis



La historia cuenta algo así…

En 1979 la empresa había inaugurado en Nueva York, Nintendo of America, con la idea de comercializar su producto estrella de Japón. Pero su éxito en el mercado asiático no se tradujo al americano, saturado de miniconsolas y con gustos diferentes.

Ante semejante crisis, la empresa decidió diseñar un videojuego desde cero, adaptado a las costumbres americanas. Shigeru Miyamoto novato diseñador de videojuegos tuvo entonces su oportunidad. Él comenzó analizando las razones del éxito de los videojuegos de aquella época y comprendió que los más populares contenían una pequeña historia en la que el jugador debía inmiscuirse.

Miyamoto, teniendo en mente el argumento de la serie animada Popeye y las escenas de la película King Kong, sintetizó una trama al estilo “Damisela en Apuros”: Una mujer joven y bella (Pauline) atrapada por un monstruo (Donkey Kong) que necesitaba la ayuda de un héroe (Jumpman, devenido luego en Mario) para ser rescatada.

El videojuego no sólo fue el éxito que salvó a Nintendo de su crisis y de la posterior crisis de los videojuegos en 1983, sino que también sus personajes fueron emblema de la empresa durante varias décadas posteriores protagonizando muchos éxitos como las sagas de Mario Bros.


Y aquí no termina…

El poder de análisis y síntesis de Miyamoto no terminó con el diseño del argumento del videojuego. Y ésta es la parte más interesante -a mi gusto- de la historia…

En aquél momento, la trama dentro de los videojuegos se lograba con la técnica side-scrolling (o desplazamiento lateral). Tecnología que Nintendo no dominó sino hasta 1985 con su exitosa primera versión de Super Mario Bros (sí, Jumpman en Donkey Kong).

Miyamoto tenía que lograr mostrar la trama del videojuego con aquellas limitaciones tecnológicas. Y otra vez recurrió al análisis y la síntesis:

Decidió diseñar el juego de forma vertical y contar toda la historia en una única pantalla, en la que el personaje principal debía recorrer un camino en zig-zag hasta alcanzar a la damisela atrapada, evitando las acometidas del monstruo (Donkey Kong).

Al colocar una moneda, el videojuego comenzaba con una animación explicando el background de la historia, en la que el gorila subía hasta la cima de la construcción con Pauline en sus brazos, la dejaba a su lado y luego saltaba fuertemente destruyendo la estructura para que nadie pudiera alcanzarlo.

El jugador con una sola mirada podía comprender de qué se trataba todo el videojuego: qué había sucedido antes y que debía suceder en el futuro para ganar la jugada.


El Reporte A3

Una de las herramientas más versátiles y útiles de Lean Manufacturing, es el Reporte A3.

Originado en el ciclo PDCA de Edward Deming, se utiliza comúnmente para la resolución de problemas. Pero también sirve para reportar e impulsar la toma de decisiones una situación compleja, como por ejemplo y sin limitar, el avance de un proyecto.

Un Reporte A3 contiene la siguiente información y en el orden mostrado:
  • Background
  • Situación actual
  • Objetivos
  • Análisis de la Situación
  • Recomendaciones
  • Plan de Acción
  • Resultados del Plan de Acción
Este reporte se realiza en una única hoja de formato A3, y su ventaja es que contiene toda la información necesaria -sin excedentes ni faltantes- en un único lugar. Realizar este reporte requiere un gran poder de síntesis, capacidad de priorización y habilidad para diferenciar la información relevante de la información trivial o redundante.

A esta altura del artículo, tu pensarás… ¿Qué tienen en común la pantalla del Donkey Kong con el Reporte A3 además de su origen japonés?

¡Sencillo! Ambas soluciones utilizan el poder de la síntesis para soportar decisiones contando el pasado, el presente y el futuro alcanzable en un sólo pantallazo.

En el caso del Donkey Kong, la decisión a tomar era jugar o no hacerlo. Y ya sabemos cuál fue la decisión más tomada…



El Poder de la Síntesis

Cuando nos enfrentamos a una situación compleja, hay dos habilidades clave que rápidamente tenemos que poner en juego:
  1. La Capacidad de Análisis, y
  2. La Capacidad de Síntesis.
¿Y por qué ambas dos? Simplemente porque no hay capacidad de síntesis sin capacidad de análisis. Y paso a explicar:

La capacidad de análisis consiste en interpretar la situación de tal manera que se puedan separar las partes del todo hasta conocer sus elementos fundamentales y especialmente las relaciones que existen entre ellos.

La capacidad de síntesis, por otro lado, consiste en la habilidad de construir, o mejor dicho, de reconstruir, fusionando u organizando las partes que aquella situación compleja de tal manera pueda ser interpretada sencillamente, de forma que esta nueva construcción permita la toma de decisiones. Es decir, que no es lo mismo sintetizar que resumir. A diferencia de éste último, el primer concepto requiere algo de creatividad.

Las capacidades de análisis y síntesis permiten entender la realidad con la que nos enfrentamos y simplificar su descripción. Pero no sólo ello. También permiten descubrir relaciones aparentemente ocultas y construir otras relaciones totalmente novedosas.

Estas capacidades, que están íntimamente relacionadas con habilidades tales como abstracción, organización, pensamiento sistémico, pensamiento crítico y resolución de problemas, son un gran potencial en una persona siendo útiles en todos los aspectos de la vida, no sólo en el profesional. Sin embargo, no son capacidades muy comunes, y suelen ser poco buscadas.

Me gustaría entonces definir el Poder de la Síntesis como: “la capacidad para analizar y valorar situaciones o problemas complejos, identificando aquello realmente importante, y reorganizando sus partes componentes en una forma lógica, sistemática y creativa, que favorezca la toma de decisiones.”


Arribando al final de este artículo, quisiera dejar una pequeña sugerencia:

Todas las habilidades se adquieren con entrenamiento. Puedes usar diferentes técnicas y métodos de análisis y síntesis (A3 Report, Ishikawa, Pareto, Elevator Pitch, etcétera) para formular una solución a una situación. Pero lo más importante es que tengas en mente que cuando te enfrentes a un problema complejo puedes intentar hacerte una imagen completa al estilo de la pantalla de Donkey Kong.

Recuerda que la mejor forma de favorecer una rápida toma de decisión, es poder visualizar toda la película, y mostrarla en un sólo pantallazo.


Autor: Pablo Quintela (Pablo es egresado del Posgrado en Management Estratégico)

24 de octubre de 2023

De pragmáticos y programadores: “depende de ti proporcionar soluciones, no excusas”


En esta “oportuncrisis” que es el combo “pandemia + cuarentena” parece darse una oportunidad única no solo para leer sino (¿porqué no?) para releer algunas obras que nos marcaron y nos formaron. Primero mi  tiempo fue para la trilogía maravillosa de J. R. R. Tolkien. Ahora le tocó el turno a los autores Andy Hunt y Dave Thomas con su “The Pragmatic Programmer”, obra esencial para la vida personal y laboral de todo desarrollador de software.

Sigo teniendo la vieja edición original de Octubre de 1999. Y, a pesar de existir una edición más nueva por el vigésimo aniversario, es, definitivamente, un libro que se lleva fantástico con el paso del tiempo.

Leí por ahí que tal vez no sea el libro ideal para aquellos que se inician en la programación, ¿o sí? Aquellos que estén dando sus primeros pasos en el mundo de la programación tal vez se encuentren con tópicos algo crípticos, pasajes muy técnicos o avanzados, pero el mensaje seguro que llega. Para aquel que tiene algo de experiencia, es ideal, porque complementa la formación. Y debería ser obligatoria su relectura para todo programador avanzado. 

Personalmente lamento no haberlo releído antes…

El libro, en sí, es un compendio de “tips”: ideas útiles, claras y concretas para mejorar los skills técnicos y humanos de los programadores. Rescatar esos tips sería, tal vez, lo más sencillo, pero en este caso quise ir más allá y extraer las mejores y más representativas ideas del libro. 

Si te interesa la programación, estás aprendiendo a programar o ya sabés programar, deberías tenerlo. Y leerlo. Y releerlo. 

Pueden encontrarlo acá, junto con muchas otras cosas muy interesantes: pragprog.com

Algo particular de esta relectura fueron las numerosas retrospectivas y flashbacks que me surgieron. Situaciones muy puntuales olvidadas en un rincón remoto de la memoria de hace 10, 15 o hasta 20 años atrás. Discusiones. Festejos. Reproches. Proyectos. Empresas. Jefes. Amigos… 

Pero lo que más me sorprendió es el enfoque ÁGIL de los tips, del libro, de las argumentaciones en general. 

Hoy, la “agilidad” está absolutamente instalada a nivel de prácticas de desarrollo y gestión de proyectos y personas en la industria del software. El paradigma ágil domina y ofrece un enfoque superador a las metodologías tradicionales, predictivas. Y esto está presente a lo largo de todo el libro. Un libro publicado un año y medio ANTES de la firma del Manifiesto Ágil (agilemanifesto.org/iso/es/manifesto.html). ESE es un valor en sí mismo. Porque es fácil de ver ahora, con 20 años de historia transcurridos. Pero es lo que refuerza la idea del valor, por la visión de Hunt y Thomas (ambos firmantes originales del Manifiesto). Una visión que marca la actual época, el state of the art de la programación. Visionarios es poco. Gurúes les quedaría mejor. 

 

Dividí las ideas extraídas en estas categorías:

  • Forma de pensar del programador: el funcionamiento de la cabeza del programador no es algo que podamos definir como “normal”. El programador analiza, estructura, agrupa, optimiza su trabajo, pero también su día a día. Desde la forma en se prepara el desayuno hasta cómo hace las compras en el súper
  • Gestión de proyectos: todo programador (salvo aquel que está haciendo un desarrollo propio para sí mismo) trabaja en el contexto de un proyecto, equipo u organización que requiere mantener ciertos parámetros de orden y procesos, sean más o menos ágiles, más o menos formales, más o menos cumplidos… 🙂
  • Herramientas: se usa software para desarrollar software. Se usan herramientas para crear otras herramientas. Pero también “útiles”, procesos, metodologías y prácticas, automatizaciones… 
  • Calidad de código: es el objetivo final, poder crear un software de calidad que cumpla con las expectativas del usuario, satisfaga una necesidad del cliente e implique un beneficio para el desarrollador de ese software. 

Aquí vamos, con una traducción libre (con el perdón del Colegio de Traductores 😐 ) desde el original en inglés:

1) Forma de pensar del programador

“(…) depende de ti (programador) proporcionar soluciones, no excusas”

“En lugar de excusas, brinda opciones. No digas que no se puede hacer; explicar qué se puede hacer para salvar la situación.”

“Nuestro objetivo es pensar de manera declarativa (especificando qué se debe hacer, no cómo) y crear programas altamente dinámicos y adaptables. Hacemos esto adoptando una regla general: programa para el caso general, y colocamos los detalles en otro lugar, fuera de la base del código compilado.”

“En todos los niveles, las personas operan con muchos supuestos en mente, pero estos supuestos rara vez se documentan y a menudo entran en conflicto entre diferentes desarrolladores. Las suposiciones que no se basan en hechos bien establecidos son la ruina de todos los proyectos.”

“Realmente no importa si el error es culpa tuya o de otra persona. Sigue siendo tu problema.”

“Si le das a tus usuarios algo con lo que jugar en forma temprana, sus comentarios a menudo te llevarán a una mejor solución eventual”

“CADA PIEZA DE CONOCIMIENTO DEBE TENER UNA REPRESENTACIÓN INDIVIDUAL, SIN AMBIGÜEDADES Y AUTOMÁTICA EN UN SISTEMA.”

“Una técnica muy simple pero particularmente útil para encontrar la causa de un problema es simplemente explicárselo a otra persona.”

“La metáfora de la jardinería está mucho más cerca de las realidades del desarrollo de software (en comparación con la arquitectura o construcción). Quizás una determinada rutina ha crecido demasiado o está tratando de lograr demasiado: debe dividirse en dos. Las cosas que no funcionan según lo planeado deben ser desmalezadas o podadas.”

“Hay una técnica simple para cumplir con los requisitos de los usuarios que no se usa con la suficiente frecuencia: convertirse en usuario. ¿Estás escribiendo un sistema para la mesa de ayuda? Pasa un par de días monitoreando los teléfonos con una persona de soporte con experiencia. ¿Estás automatizando un sistema de control de stock manual? Trabaja en el almacén durante una semana.”

“Cuando sientas una duda persistente, o experimentes cierta reticencia al enfrentar una tarea, presta atención. Es posible que no puedas identificar exactamente qué está mal, pero dale tiempo y tus dudas probablemente se cristalizarán en algo más sólido, en algo que puedas abordar”

“El desarrollo de software todavía no es una ciencia. Deja que tus instintos contribuyan a tu trabajo.”

“Un diseño que deja al codificador sin espacio para la interpretación roba el esfuerzo de programación de cualquier habilidad y arte.”

“A menudo, es sólo durante la codificación que ciertas opciones se vuelven aparentes.”

“Los buenos desarrolladores tienden a ser apasionados por su trabajo.”

 

2) Gestión de proyectos

“Los proyectos de forma lenta e inexorable se salen completamente de control. La mayoría de los desastres de software comienzan siendo demasiado pequeños para darse cuenta, y la mayoría de los desbordes en los proyectos ocurren día a día. Los sistemas se desvían de sus especificaciones característica por característica, mientras que parche tras parche se agrega a un código hasta que no queda nada del original.”

“¿Qué tipo de cosas buscarías investigar (o clarificar) con un prototipo? Cualquier cosa que conlleve riesgos. Cualquier cosa que no se haya probado antes, o que sea absolutamente crítica para el sistema final. Cualquier cosa no probada, experimental o dudosa. Cualquier cosa con la que no te sientas cómodo”

“Con el soporte adecuado, puedes programar mucho más cerca del dominio de la aplicación. No estamos sugiriendo que tus usuarios finales realmente programen en estos (meta) lenguajes. En cambio, te estás dando (“regalando”) una herramienta que te permite trabajar más cerca de su dominio.”

“Debes considerar formas de acercar tu proyecto al dominio del problema. Al codificar en un nivel superior de abstracción, puedes concentrarte en resolver problemas del dominio y puedes ignorar los pequeños detalles de implementación.”

“Esto puede no ser popular entre los gerentes, que generalmente quieren un número puro y duro (y rápido) antes de que el proyecto incluso comience. Deberás ayudarlos a comprender que el equipo, su productividad y el entorno determinarán el cronograma. Al formalizar esto y refinar la programación como parte de cada iteración, les darás las estimaciones de programación más precisas que puedas.”

“Qué decir cuando se le pide un presupuesto? Dices ‘me pondré en contacto contigo’.”

“Nadie en la breve historia de la informática ha escrito una pieza de software perfecta.”

“Cuando el sistema falle, ¿fallará con ‘elegancia’?”

 

3) Herramientas

“Elige un editor (de textos), conócelo a fondo y úsalo para todas las tareas de edición. Si usas un solo editor (o conjunto de teclas) en todas las actividades de edición de texto, no tienes que detenerse a pensar cómo manipular el texto: las pulsaciones de teclas necesarias serán un reflejo”

“Utiliza siempre el control del código fuente”

“Siempre. Incluso si eres un equipo de una sola persona en un proyecto de una semana. Incluso si es un prototipo “desechable”. Incluso si las cosas en las que estás trabajando no son código fuente. Asegúrese de que todo esté bajo control del código fuente”

“Nunca subestimes el costo de adoptar nuevas herramientas y métodos. Debes estar preparado para afrontar los primeros proyectos utilizando lo nuevo como una experiencia de aprendizaje.”

“¿Deberíamos usar métodos formales? Absolutamente. Pero recuerda siempre que los métodos formales de desarrollo son solo una herramienta más en la caja de herramientas.”

“Los programadores pragmáticos analizan las metodologías de manera crítica, luego extraen lo mejor de cada una y las combinan en un conjunto de prácticas de trabajo que mejora cada mes. Esto es crucial”

 

 4) Calidad de código

“No dejes “ventanas rotas” (malos diseños, decisiones incorrectas o código deficiente) sin reparar. Arregla cada una tan pronto como sea descubierta.”

“Debes tender a ver el relevamiento de requisitos, el diseño y la programación como diferentes facetas del mismo proceso: la entrega de un sistema de calidad”

“A los programadores se les enseña a comentar su código: ‘un buen código tiene muchos comentarios’. Desafortunadamente, nunca se les enseña por qué el código necesita comentarios: el código incorrecto requiere muchos comentarios”

“Dos o más cosas son ortogonales si los cambios en una no afectan a ninguna de las otras. En un sistema bien diseñado, el código de la base de datos será ortogonal a la interfaz de usuario: puede cambiar la interfaz sin afectar la base de datos e intercambiar bases de datos sin cambiar la interfaz.”

“Una de las ventajas de detectar problemas lo antes posible es que puedes ´romperlo´ en forma temprana. Y muchas veces, ‘romper’ tu programa es lo mejor que puedes hacer.”

“Debido a que los programadores pragmáticos no confían en nadie, incluidos sí mismos, creemos que siempre es una buena idea construir código que realmente verifique que los recursos se hayan liberado adecuadamente.”

“Organiza tu código en celdas (módulos) y limita la interacción entre ellas. Si un módulo se ve comprometido y tiene que ser reemplazado, los otros módulos deberían poder continuar.”

“No solo prueba tu código, sino también prueba sus suposiciones. No adivines; en realidad inténtalo. Escribe una afirmación para probar tus suposiciones. Si tu afirmación es correcta, ha mejorado la documentación en tu código. Si descubres que tu suposición es errónea, considérate afortunado.”

“En esencia, la refactorización es el rediseño. Todo lo que tu u otros miembros de tu equipo diseñaron se puede rediseñar a la luz de nuevos hechos, entendimientos más profundos, requisitos cambiantes, etc.”

“No hay mejor manera de corregir errores que evitándolos en primer lugar. De hecho, al construir los casos de pruebas antes de implementar el código, puedes probar la interfaz antes de comprometerte con ella.”

“Todo el software que escriba será probado, si no es por ti y tu equipo, lo será por los usuarios finales”

“Las pruebas (testing) son más culturales que técnicas; podemos inculcar esta cultura de prueba en un proyecto independientemente del lenguaje (de programación) que se utilice.”

“La mayoría de los desarrolladores odian las pruebas (testing). Tienden a probar levemente, sabiendo inconscientemente dónde se romperá el código y evitando los puntos débiles (el “camino feliz”). Los programadores pragmáticos son diferentes. Estamos obligados a encontrar nuestros errores ahora, por lo que no tendremos que soportar la vergüenza de que otros encuentren nuestros errores más tarde.”

“En primer lugar, el código nunca está ‘terminado’ realmente. Más importante aún, no puedes afirmar que puede ser utilizado por nadie hasta que pase todas las pruebas disponibles.”

“Una vez que un ‘tester humano’ encuentra un error, debería ser la última vez que un ‘tester humano’ encuentra ESE error. Las pruebas automáticas deberán modificarse para asegurar que ese error en particular, a partir de ese momento, nunca más ocurra.”

“Comentar el código fuente le brinda la oportunidad perfecta para documentar esos escurridizos fragmentos de un proyecto que no se pueden documentar en ningún otro lugar: discusiones de ingeniería, por qué se tomaron decisiones, qué otras alternativas se descartaron, etc.”

“Tu firma debe ser reconocida como un indicador de calidad.”


¿Sentido común? Sí, muchísimo. Pero recordemos también que es el menos común de los sentidos muchas veces… ¿Extrapolable, por ejemplo, al rol docente, a muchos trabajos de manufactura, a labores relacionadas a la atención al cliente y, sobre todo, a desarrollo de productos? También. Las buenas prácticas, sobre todo aquellas que apuntan a la calidad, pueden ser reinterpretadas en muchas industrias diferentes. Por eso este libro trasciende su objetivo, su propio nombre.

Es, en esencia, la descripción del “trabajador pragmático”.


Autor: Emilio Rasic (Emilio es egresado de los Posgrados PBA y Management Estratégico)

Fuente: emiliorasic.com https://www.emiliorasic.com/de-pragmaticos-y-programadores-depende-de-ti-proporcionar-soluciones-no-excusas/

17 de octubre de 2023

El lado B de trabajar con objetivos y su impacto psicológico

En tantos años de trabajar en planificación y ayudar a otras personas a definir planes y lograr sus metas, me equivoqué muchísimo, he aprendido y cambiado los métodos constantemente y últimamente trabajando con la metodología OKR me enfoco principalmente en la psicología y las implicancias y consecuencias detrás de este método.




Venimos de la cultura orientada a resultados y luego la psicología positiva con el indiscriminado “tu puedes”, que nos ha enseñado a llevar un garrote invisible, con el que nos golpeamos cada vez que equivocamos el rumbo o no alcanzamos las metas.

Aprendimos a echarnos la culpa por casi todo lo que hacemos mal y a dudar de nuestra responsabilidad cuando lo hacemos bien.

La insatisfacción frente a los propios logros y la ambición actúan como un motor, pero por funcionar de manera sobre acelerada, suele quemarse antes de tiempo.

Si sos demasiado auto-exigente y auto-crítico, vas a utilizar un estilo dicotómico, de extremos, las cosas sólo serán blancas o negras, no hay matices. Absurdo.

Te vas a referir a vos mismo en términos categóricos e inflexibles, como: nunca, siempre, todo y nada. Estas palabras deberían suspenderse de nuestra lengua.

Los humanos utilizamos estándares internos y criterios aprendidos sobre la excelencia y lo inadecuado. Estos estándares se desprenden del sistema de creencias, valores y necesidades que poseemos.

Una elevada auto-exigencia producirá estándares de funcionamiento altos y rígidos.

Sin embargo, si bien es importante mantener niveles de exigencia personal relativa o moderadamente altos para ser competentes, el "cortocircuito" se produce cuando estos niveles son irracionales, demasiado altos e inalcanzables.

La idea de que debo destacarme en todo lo que hago, que debo ser el mejor a toda costa y que no debo equivocarme, son imperativos que llegan a volverse insoportables.

ACÁ ARRANCA TODO: un nivel exagerado de auto-exigencia genera patrones estrictos de autoevaluación, por lo que SIEMPRE tendrás la sensación de que tu conducta es insuficiente.

Vas a entrar al círculo vicioso que es autodestructivo.



Pese a tus esfuerzos, las metas serán inalcanzables. Al sentirte incapaz, tu autoevaluación será negativa.

Con este sentimiento de ineficacia, tu organismo comenzará a segregar más adrenalina de lo normal, te producirán estrés y ansiedad y afectarán tu rendimiento alejándote cada vez más de las metas.

Definitivamente tenés que intentar ser menos duro contigo mismo.

Una guía para salvarte del auto-castigo indiscriminado incluye:
  1. Tratar de ser más flexible con otros y con vos mismo.
  2. Revisar nuestras metas y las posibilidades reales para alcanzarlas
  3. No focalizar solo en lo que falta y los errores, y festejar los avances y los logros.
  4. No te maltrates, no sos perfecto, sé moderado con tu autoevaluación. Dale lugar a la voz interior que te aplaude.

Autor: Alejandro Lang (Alejandro es profesor de la Diplomatura DIDIE)

10 de octubre de 2023

El poder del crecimiento y desarrollo en el mundo laboral

Hoy quiero reflexionar sobre un tema que ha estado rondando en mi mente últimamente y que considero crucial para el bienestar y el éxito de los profesionales en el mundo laboral: el impacto de no tener un proyecto de carrera dentro de una compañía y los sentimientos que esto puede desencadenar en los equipos.

En la dinámica actual del mercado laboral, muchas personas están cambiando de empleo en busca de oportunidades que podrían haberse materializado dentro de sus antiguas organizaciones. Es un hecho fascinante y, al mismo tiempo, inquietante (Lo vemos día a día en nuestro feed de LinkedIn). La pregunta que surge es: 🤔 ¿Por qué ocurre esto con tanta frecuencia?

Si bien las respuestas pueden ser diversas y complejas, uno de los principales desafíos que enfrentan los empleados que sienten que no pueden crecer dentro de su empresa actual es la falta de comunicación efectiva. La generación de conversaciones significativas con los superiores puede ser el punto de partida para entender las razones detrás de esta percepción y, lo que es más importante, para brindar el feedback necesario para el crecimiento y desarrollo personal.

¡A NO SUBESTIMAR EL IMPACTO DE ESTA SITUACIÓN!

La desmotivación que puede surgir al sentir que las puertas del crecimiento están cerradas puede tener un efecto dominó en la moral y la motivación de los equipos.😞 Es natural buscar oportunidades donde se sientan valorados y donde se les ofrezca la posibilidad de crecer y evolucionar en su carrera.

A medida que reflexiono sobre esto, creo firmemente en la importancia de fomentar una cultura organizacional que priorice el desarrollo de sus empleados. Implementar procesos de mentoría y establecer un espacio donde se promueva el Diálogo Abierto puede ser un gran paso hacia la creación de una empresa que nutre y hace crecer las competencias internas. Esta inversión no solo beneficia a los empleados, sino que también impacta positivamente en la Retención Del Talento y en el alcance de objetivos empresariales.

A todos aquellos que puedan estar atravesando este sentimiento de estancamiento, les digo: no se desmotiven. El Proceso De Cambio a menudo comienza desde dentro. Iniciar conversaciones con sus superiores y con el área de talento de la compañía puede abrir puertas que ni siquiera sabían que existían.

En última instancia, todos tenemos el poder de influir en nuestro Proyecto de Carrera. Comparto estas reflexiones con la esperanza de que inspiren conversaciones y acciones que fomenten un entorno laboral donde el crecimiento sea una constante y donde todos tengamos la oportunidad de alcanzar nuestro potencial más elevado.👏👏


Autor: Elías Cobelo (Elías es egresado del Posgrado PBA)

3 de octubre de 2023

La reingeniería de procesos en tiempos de transformación digital

Luego de un extenso período sin escribir artículos vuelvo con un pequeño texto, que espero que sea del agrado de ustedes. Fueron dos años realmente intensos en donde tuve la oportunidad de trabajar profundizar mi conocimientos y experiencia en Transformación Digital y puse toda mi energía mental (y muchísimo tiempo) al hacer una maestría en tecnología además de comenzar el camino de la docencia universitaria. Muchos cambios que no solo fueron en lo profesional, sino que además impactaron en lo personal. como me gusta decir “uno es el promedio de la gente que se rodea”, y mi promedio subió muchísimo.

“Lo que haces de 9 a 18 te ayuda a pagar las cuentas. Lo que hagas después de las 18, te llevará al siguiente paso”.

Seguramente lejos de descansar voy a seguir absorbiendo nuevos conocimientos por medio de experiencias que me enriquezcan como persona y profesional. Tengo muchas deudas pendientes conmigo mismo en muchas áreas, que con el paso del tiempo intentare ir saldando. La maestría me dio la posibilidad de abrir la puerta a muchas áreas de conocimiento que me eran desconocidas para mi, o como otra frase que me gusta decir “estaban fuera de mi zona intelectual de confort”.


Hice mi tesis sobre un tema del cual me desempeño y conozco (recomendación para cualquier maestrando que este en búsqueda de un tema para realizar su tesis, elegir un tema familiar), Transformación Digital (TD). Base la hipótesis en que la TD tiene que accionar sobre tres pilares fundamentales, Personas - Tecnologías - Procesos. Lejos de ser una elección arbitraria lo que se buscaba con esta aplicación era la nivelación en su implementación. Para usar una rápida metáfora, la Tecnología, sería la herramienta que vamos a usar, los Procesos el cómo vamos a usar esa herramienta y finalmente las Personas quienes usaran esa herramienta.

"Definimos un proceso de negocios como un conjunto de actividades que recibe uno o más insumos y crea un producto de valor para el cliente."

Si bien las bellas soluciones tecnológicas han sido disruptivas más de una vez rompiendo cascarones de límites establecidos, no dejan de solamente expandirlos en nuevos deseos inconclusos de aquellos que buscamos la próxima maravilla esperando latente a ser descubierta y volver a apostar cual ludópatas a un futuro lleno de soluciones.

La Reingeniería de Procesos fue un término que acuño Michael Hammer de la mano de James Champy en los años ‘80. Pero no fue hasta los ‘90 que se convirtió en una verdadera tendencia. Formulaba que básicamente dentro de las organizaciones al momento de evaluar sus procesos se debía de realizar dos preguntas igualmente de importantes: ¿Por qué hacemos lo que hacemos? y ¿Teniendo la disponibilidad de la tecnología actual y conociendo lo que sabemos del proceso de negocio, como haríamos desde cero el proceso en cuestión?

Estas dos preguntas de la Reingeniería de Procesos es lo que la separa de otras iniciativas que podamos afrontar en nuestras organizaciones tales como Mejora Continua, Calidad Total, Six Sigma, etc. La Reingeniería de Procesos invita a repensar los procesos de negocio sobre todo aquellos que forman parte del núcleo del mismo empujando los mismos hacia el abismo del presente para darles un empujón hacia el futuro.

Más allá de los casos de éxito que nos puedan presentar la bibliografía sobre este tema, creo que esta profundamente relacionado con la TD. Mejor dicho la TD está íntimamente relacionada con la Reingeniería de Procesos. Como muchas veces escuchamos decir “estamos no ante una época de cambios sino ante un cambio de época”, si bien la frase además de trillada y bonita parece solo un juego de palabras no deja por eso ser menos cierta.

La época que estamos transitando en donde tantas empresas surfean una gran ola de TD en sus negocios en donde la creciente creación de sustitutos de productos y servicios y cada vez menos competidores nos lleva a nuestros propios abismos a hacernos estas viejas preguntas que la Reingeniería de Procesos solía hacer.

Cuestiones como Experiencia de Usuario (UX), economía colaborativa, startups y tantas otras prácticas que en los últimos años han impactado a distintas industrias son solo una pequeña punta de un hilo que hay que desenredar y lejos estamos de hacerlo por el momento. Pero seguramente podremos tener una visión mucho más clara de cuál podría ser el futuro que elijamos para emprender el camino de la TD con las dos preguntas que ya nos hacían Hammer y Champy allá por los años ‘80.



Autor: Federico Dappiano (Federico es profesor de la Diplomatura DIDIE)